Berlín es una de las metrópolis con mayor población en Europa, aunque es relativamente joven (en comparación a otras capitales vecinas), pues cuenta con menos de 800 años de vida desde su fundación en 1237. Es una ciudad reconstruida, en constante transformación y progreso. Un lugar en donde la multiculturalidad, el arte y la historia la hacen única y atractiva a los ojos de los miles de turistas que cada año la visitan.
Un poco de historia
Esta ciudad, situada al noreste de Alemania muy cerca a la frontera con Polonia, siempre traerá a nuestras memorias a la Segunda Guerra Mundial y el régimen nazi.
Es inevitable mencionar que tras la guerra, Berlín quedó desbastada y que posteriormente su situación empeoró con la división del Este con la República Democrática Alemana (RDA) y el Oeste, con la República Federal de Alemania (RFA). Fue así como mediante el levantamiento de un muro físico la ciudad quedó dividida en dos partes.
El Muro de Berlín. Construido al inicio de la Guerra Fría, el 13 de agosto de 1961, dividió a los berlineses durante 28 angustiosos años, convirtiendo así a la parte Oeste en una isla cercada en el centro de la república democrática. La terrible división causó la muerte de mucha gente que intentaba huir al otro lado del muro. Tras su histórica caída, el 19 de noviembre de 1989, Alemania se volvió a reunificar.
Hoy en día, “El Muro de la Vergüenza” ha quedado en el pasado. Aunque al este de la ciudad, en el East Side Gallery, aún pueden apreciarse 1.3 km de pared, los cuales han sido utilizados por numerosos artistas para plasmar sobre él grafitis y diversas obras de arte.
En la actualidad Berlín es una ciudad diferente, moderna y cosmopolita que mira sólo al futuro. Los cambios sociales, políticos y culturales que ha sufrido durante su reconstrucción, la han alejado de aquellos hechos nefastos, vividos durante parte de su historia, que más de uno preferiría olvidar.
Principales atracciones
Berlín es una ciudad enorme, necesitaríamos varios días para poder recorrerla por completo. Sin embargo, hay lugares específicos que el visitante no puede dejar de ver como:
- La Catedral de Berlín, la catedral es un símbolo emblemático de este lugar. Con su imponente infraestructura se presenta como el mayor templo protestante de Berlín. Desde su cúpula se pueden apreciar las mejores vistas de la ciudad.
- La Puerta de Brandemburgo, sus 26 metros de altura datan del siglo XVII, aunque después de la Segunda Guerra Mundial tuvo que ser reconstruida. Se le considera un símbolo de la reunificación de los alemanes tras la caída del Muro de Berlín en 1989.
- Memorial al Holocausto, la obra de Eisenman y Happold. Un emotivo lugar construido entre los años 2003 y 2004, situado muy cerca de la Puerta de Brandemburgo. Se trata de 2,711 bloques de hormigón, levantados en diferentes tamaños, en memoria de los judíos asesinados en Europa.
- Barrio Gubernamental de Berlín, en esta zona se puede apreciar construcciones de arquitectura romana de los siglos XIX y XX. Tales como: el Marie Elisabeth Lüders, el Paul Löbe, Jakob Kaiser Haus y el Reichstag (Parlamento Federal alemán).
- Reichstag o parlamento alemán, su cúpula de vértigo fue diseñada en los noventas, por el arquitecto Norman Foster y se ha convertido en todo un símbolo de la ciudad. Impresionan sus espejos, cristales y pasarelas situadas en lo alto del edificio.
- Isla de las Museos, basada en cinco museos que exponen tesoros culturales de todo el mundo. En 1999 fueron nombrados Patrimonio de la Humanidad. Los museos son los siguientes: Museo de Pérgamo, Museo Nuevo, Museo Antiguo, Museo Bode y la Galería Nacional Antigua.
- Topografía del Terror, un recinto del Palacio del Príncipe Albrecht, usado desde 1933 hasta 1945 por la Gestapo y la SS como cuartel general. Una exposición al aire libre documenta la historia de cómo fue el centro de control del programa nacionalsocialista de exterminio y persecución.
- “Checkpoint Charlie”, el paso fronterizo, entre rusos y estadounidenses, durante la Segunda Guerra Mundial. Aquí, los visitantes podrán apreciar una caseta de control, copia de la original. En el museo de sitio se halla un gran archivo documental sobre la historia del Muro de Berlín.
- Universidad Humboldt de Berlín, es la más antigua de la ciudad. De este claustro del saber salieron: Marx, Lenin, Hegel y Einstein. Esta universidad actualmente ha sido reformada por el afamado arquitecto Norman Foster.
- Palacio Charlottenburg, una construcción barroca de 1695, que en su momento fue residencia de los reyes de Prusia. Dentro del palacio llaman la atención sus grandiosos y hermosos jardines.
- Torre de la Televisión de Berlín, con 368 metros de altura, la torre es el edificio más alto de Alemania. Situada en el centro de Alexanderplatz, fue construida por la RDA en 1969 para simbolizar el poderío comunista frente al capitalismo. En la Torre de televisión hay un restaurante giratorio, ideal para aquellos que les gusta desafiar las alturas.
Estando en Berlín podemos visitar el Estadio Olímpico o recorrer algunos de los extensos parques y jardines de la ciudad, si queremos huir del bullicio de la modernidad e ir en busca de sosiego. El Tiergarten es el parque principal, ubicado en pleno centro de la ciudad. En este parque podemos contemplar la Columna de la Victoria.
Berlín posee también una de las orquestas más famosas del mundo como es la Orquesta Filarmónica de Berlín, asimismo cuenta con tres grandes teatros de Ópera.
La ciudad no tiene mar, pero la atraviesan los ríos Spree y Havel. Los mismos que tanto berlineses como turistas disfrutan de sus aguas durante el verano.
Gastronomía
En esta ciudad la comida internacional abunda. En especial los restaurantes turcos y asiáticos. La gastronomía berlinesa está basada en dos ingredientes principales: las Salchichas y el Chucrut. Entre los platillos más populares: el Currywurst, el Boulette y el Eisbein. Y a pesar de ser deliciosos y variados, la mayoría de sus platos son altamente calóricos.
La cerveza es el producto nacional alemán. Hay cientos de texturas, sabores y marcas hechos para satisfacer todos los gustos. Desde luego, un completo paraíso para los amantes de esta bebida.
Ocio y entretenimiento
Berlín es una ciudad joven y alegre. Sus tradicionales bares y tabernas atraen a una gran cantidad de turistas que visitan esta metrópoli. Y que después de un día turístico acuden a saciar su sed con algunas de las diversas cervezas artesanales. Las zonas más animadas de la ciudad son las de Kurfürstendamm y Nollendorfplatz.
Asimismo, a Berlín se le conoce por sus diversos festivales de música, que va desde música clásica a la electrónica. Así como el ‘Carnaval de las culturas’, un festival de verano que reúne a todas las etnias que cohabitan en la ciudad.
Cómo llegar
- La mejor opción para llegar a Berlín es por vía área. La ciudad cuenta con dos importantes aeropuertos: el Aeropuerto de Berlín-Schönefeld (SXF) y el Aeropuerto de Berlín-Tegel (TXL). También es posible llegar en tren desde distintos puntos del país y de Europa.
Texto y fotografía: Libia CV
