Gante es una de las ciudades más turísticas y hermosas de Bélgica, al punto de disputar su belleza con su vecina Brujas. Una ciudad rodeada por el agua, el punto de encuentro de los ríos Lys y Escalda.
Esta ciudad, de aproximadamente 250.000 habitantes, cuenta con una vida juvenil y bastante animada, en parte debido a los numerosos estudiantes universitarios que ésta posee. Es por eso que al llegar a Gante nos encontramos con un lugar transitado, con numerosos comercios, entre mercados, tiendas, restaurantes y bares a la orden del día.
Gante, al igual que Brujas, es una ciudad de canales y puentes los cuales embellecen la ciudad. Su centro histórico medieval destaca por su gran número de monumentos históricos. Además, fue la residencia de los Condes de Flandes y una de las ciudades más importantes de Europa durante la edad media.
Principales atracciones
En Gante hay mucho por ver y descubrir, pero entre las principales atracciones figuran:
- La Catedral de San Bavón, una impresionante iglesia que ha fusionado armoniosamente los estilos gótico, barroco y románico. Siendo este último el estilo original a la hora de construirla.
Se tardó tres siglos en construir este templo y fue para mediados del siglo XV que finalmente quedó terminado. En su interior se exhiben importantes tesoros artísticos como: el Púlpito de estilo barroco del siglo XVIII, el retablo de la Adoración del Cordero Místico de Hubert y Van Eyck y Salomón recibe a la Reina de Saba de Lucas de Heere. Además, en este lugar fue bautizado el emperador romano Carlos V.
- La Torre Belfort, una imponente torre de 91 metros de altura que fue construida a inicios del siglo XIII. Esta torre que fue creada como símbolo de la independencia de la ciudad, adorna su cima con un dragón dorado, quien parece ser el guardián que vigila la ciudad.
Desde lo alto de la torre se pueden apreciar vistas panorámicas de la ciudad y está abierta al público todos los días del año. Debido a su belleza este monumento fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1999.
- El Muelle de las Hierbas, uno de los principales emblemas de la ciudad. Este pequeño y hermoso puerto de la época medieval está rodeado por numerosos edificios de impresionante arquitectura que se alinean a lo largo del canal.
La mayoría de ellos pertenecen a ex casas gremiales todos de estilos gótico y renacentista. El Muelle de las Hierbas es el lugar perfecto para pasear y relajarse junto al agua. En esta zona se levanta el puente de San Miguel desde donde se pueden obtener las mejores vistas del canal y de los edificios en conjunto.
- El Castillo de los Condes de Gante, conocido también como el Castillo de Gravensteen, es un castillo medieval construido a finales del siglo XII, bajo la orden del Conde Felipe de Alsacia. Con el fin de demostrar su poder y quién era el que realmente gobernaba Gante.
Al parecer los Condes de Flandes estilaban tener un Castillo en las principales ciudades del país. Y es que este castillo es el que mejor se ha conservado hasta nuestros días.
El Castillo de los Condes de Gante, además de servir como residencia funcionó también como un lugar de defensa y como prisión. En la actualidad el Castillo alberga una especie de museo dividido en distintas plantas en donde se exhiben las armas, armaduras y demás objetos de la época.
En donde destaca la Sala de Torturas. Un lugar en donde se exhiben los distintos instrumentos y métodos de tortura que se utilizaban en contra de los presos o acusados de brujería durante la Santa Inquisición.
Camisas de fuerzas, hierros ardientes o guillotinas con hoja, son algunos de los objetos que se pueden apreciar en esta sala. Objetos que te estremecen el cuerpo de sólo de imaginar el uso que tenían.
Asimismo, en la parte alta del Castillo, entre torreones y tejados, se puede disfrutar de unas fantásticas vistas de Gante.
Por otro lado, durante los fines de semana, suelen realizarse representaciones medievales justo a la entrada del Castillo, algo que hace aún más fantasiosa nuestra visita a esta fortaleza.
Cómo llegar a Gante
- Al igual que a Brujas, para llegar a Gante hay que hacerlo desde Bruselas, en un tren que tarda sólo entre media hora y cuarenta minutos.
Texto y fotografía: Libia CV